Museo de la Ciudad de México festeja 56 años de ser memoria viva de la capital

Publicado el 23 Octubre 2020
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Como un palacio que se convirtió en vivienda popular para después ser habitado por el arte, la cultura y el acervo que resguarda la memoria de la Ciudad de México desde hace más de medio siglo, así el Museo de la Ciudad de México cumple 56 años de ser la memoria viva capitalina.

Ubicado en el número 30 de la avenida José María Pino Suárez, en el Centro Histórico, el recinto inaugurado el 31 de octubre de 1964, difunde el arte y sus diversas expresiones en el espacio que alguna vez fuera hogar de los condes de Santiago de Calimaya.

Construido en 1776 por el arquitecto mexicano Francisco Guerrero y Torres, el ahora museo que ha visto pasar por sus salas y patios a relevantes figuras del arte, celebra su aniversario número 56 en medio de la pandemia provocada por COVID-19; sin embargo, sus puertas, aunque de manera controlada, están abiertas al público.

En el marco de la nueva normalidad, el espacio ha albergado la exposición multidisciplinaria 50 mujeres, 50 obras, 50 años, que a través de pintura, fotografía, escultura, escritura, textil, grabado y video aborda los estilos e inquietudes ideológicas de las mujeres artistas de las últimas cinco décadas en México; la muestra Mecanismo del cosmos, de la artista visual Sofía Echeverri, y la exposición temporal Invierno: imágenes de la arquitectura chilena contemporánea.

A la par, el recinto continúa con actividades digitales en redes sociales como la serie “Reflexiones sobre La Ruptura”, charlas a cargo del director del recinto, José María Espinasa, que todos los martes a las 19:00 horas adentra al público al universo de los exponentes de este periodo del arte en México, entre ellos Manuel Felguérez y Vicente Rojo.

José María Espinasa, su actual director, celebra la vitalidad que el edificio museístico mantiene, además de formar parte de la memoria viva y el patrimonio de la capital. “Desde la arquitectura, la pintura, la escultura, la literatura, la música y el cine, el museo ha dado cuenta de esa vitalidad de una capital como la nuestra, capaz de ser una ciudad de ciudades, de ser una ciudad refugio, de libertades, de igualdad, de derechos y formar parte de ese enorme cambio que se está dando hoy en el país”, dijo al respecto.

Además, comentó desde el patio central del recinto, que seguramente Pedro Ramírez Vázquez, arquitecto al que fue encargada hace 56 años la estructura museística del país y de la ciudad, vio el potencial que el edificio tenía como centro cultural. “En esta fuente en la que estoy, quiero pensar que nuestra emblemática sirena le está cantando ‘Las mañanitas’ al Museo de la Ciudad de México”, agregó.

Cabe mencionar a dos personajes históricos que hicieron posible este proyecto museístico, que desde 1998 forma parte de la infraestructura de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México: Adolfo López Mateos y Jaime Torres Bodet, presidente y secretario de Educación Pública de la época, respectivamente.

También destaca la labor que la historiadora Guadalupe Lozada León, como responsable de Patrimonio Histórico, Artístico y Cultural en los periodos 2006-2010, 2012- 2014 y 2018 a 2020, y como actual encargada de despacho de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México, ha hecho para preservar la vocación del museo en cuyo piso más alto se ubica una joya escondida: el Estudio de Joaquín Clausell (1865-1935) y su mural La torre de las mil ventanas.

El museo, fundado y dirigido por el antropólogo y museógrafo Federico Hernández Serrano, también resguarda en su biblioteca especializada —que lleva el nombre del encargado de la educación durante el sexenio de López Mateos— la memoria de la Ciudad de México desde el siglo XVIII, ya que cuenta con ejemplares que datan de 1765; además de alojar diarios, revistas y planos de lugares emblemáticos de la Ciudad de México, como los planos originales del mercado de la Merced. Todo este acervo está disponible al público visitante.

De esta manera, el recinto en que alguna vez el cronista mexicano Salvador Novo tuviera su estudio y organizara pláticas referentes a la historia de nuestra ciudad con los intelectuales más importantes de su época como: Edmundo O´Gorman, Miguel León Portilla, Eduardo Matos Moctezuma, Eulalia Guzmán, Francisco de la Maza, entre otros, festeja 56 años de ser casa de la cultura y la memoria de la Ciudad de México.

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